2/22/2017

MÉXICO BÁRBARO


Joaquín  Ortega Arenas.

“…John Kenneth Turner (1879-1948) fue un escritor y periodista nacido en Oregón en los Estados Unidos.
Conoció a Ricardo Flores Magón y a otros integrantes del Partido Liberal Mexicano que se encontraban presos en Estados Unidos entre 1908 y 1909. Turner entonces viajó a México para corroborar lo que los liberales le habían contado, haciéndose pasar por un hombre de negocios. De esa ingeniosa manera, logró testimonios únicos sobre la situación de esclavitud en México, en los tiempos más sanguinarios del porfiriato. Sus experiencias las narró en el libro titulado “México Bárbaro, donde logró de manera premonitoria aventurar que la situación social tendría, tarde o temprano que explotar en una revolución armada. En 1915 regresó a México para reseñar la ocupación estadounidense del Puerto de Veracruz (acción que Turner condenó con vehemencia). Posteriormente publicó otros dos libros sobre México: ¿Quién es Pancho Villa? y La intervención en México y sus nefastos factores. Al año siguiente estuvo de regreso en México y escribió sendos artículos sobre la Expedición Punitiva de Pershing…”
Han transcurrido ciento dos años, y la situación que Turner encontró en México, se ha empeorado desde que en el año de 1929, se “inventó” el monopolio político que hoy llamamos “PARTIDO REVOLUCIONARIO INSTITUCIONAL”
La Prensa diaria, nos describe lo que hoy es nuestra querida Patria.
“…Algunas organizaciones creen que están enterrados en miles de cementerios clandestinos regados por todo el país. Lo cierto es que ni siquiera las cifras de cuántos son están claras, porque el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa hizo todo lo que estuvo a su alcance para borrar, aún más, a los desaparecidos.

Apenas el lunes pasado, el subprocurador de Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República (PGR), Ricardo García Cervantes dijo que en una semana, “a más tardar”, el Gobierno federal podría tener listo el padrón de personas desaparecidas en todo el país, como resultado del combate al narcotráfico y crimen organizado. 

El funcionario confesó que desconocía la cifra exacta, pero ésta puede ser “parecida a la que se manejó al interior del Consejo Nacional de Seguridad Pública (CNSP)”: alrededor de 24 mil personas.

Las cifras oficiales son menores. Hasta marzo del año pasado, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) había registrado 5 mil 397 expedientes, de personas reportadas como extraviadas o ausentes entre 2006 y 2012. Pero presentó un aumento de cuatro desapariciones forzadas en 2006 a 346 en 2010.

Por su parte, la Secretaría de Seguridad Pública federal, mantenía 2 mil 44 casos registrados de personas extraviadas o desaparecidas. Las cifras de la Procuraduría General de la República (PGR) eran de 4 mil 800 expedientes, en tanto la Procuraduría capitalina reportaba 5 mil 229 personas extraviadas en todo México.

Y ayer, la subsecretaria de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Lía Limón, dijo que la base de datos con la que cuenta el Gobierno federal contabiliza 27 mil personas reportadas como desaparecidas.
Mientras, decenas de miembros del Comité de Madres y Familiares con Hijas Desaparecidas continúan con la esperanza de encontrar a sus hijas o hermanas con vida, en vez de enterradas en un desierto, en las sierras o en fosas clandestinas.

                                   “JUÁREZ: DESIERTO Y MORGUE”

Este municipio chihuahuense ha destacado lamentablemente por la desaparición de mujeres en los últimos años.

Desde 1993 están abiertos 116 casos de mujeres desaparecidas, según datos de la Procuraduría estatal, pero el Comité de Madres y Familiares con Hijas Desaparecidas cree que pueden suman 200. Aunque según estadísticas de organizaciones no gubernamentales, entre 1993 y 2001 se registraron más de 600 casos de este tipo en la ciudad fronteriza.

En esta urbe las madres de niñas, adolescentes y jóvenes desaparecidas buscan a sus familiares en la morgue o en el desierto, punto clandestino que se ha convertido en la tumba de varias mujeres. Tan sólo en los primeros tres meses de 2012 se localizaron al menos 13 cuerpos en el desierto del Valle de Juárez.

Imelda Marrufo, coordinadora de la organización Red Mesa de Mujeres, dedicada a apoyar a las madres con hijas asesinadas o desaparecidas en Ciudad Juárez, aseguró el año pasado que en los últimos cuatro años han registrado la desaparición de cerca de 200 adolescentes.

A principios de 2012, un grupo de familiares de mujeres desaparecidas se manifestaron frente a la Fiscalía General del Estado (FGE), para exigir el esclarecimiento de 57 casos que quedaron vigentes durante 2011.

En ese entonces, Cecilia Espinoza, integrante de la Red de Mujeres de Ciudad Juárez, dijo que durante seis años 190 mujeres se reportaron como desaparecidas, quedando vigentes unos 57 casos, de los cuales 36 correspondían a menores.

Detalló que en los primeros nueve meses de 2011, se reportaron 190 mujeres desaparecidas; 30 en 2010; 20 en 2009 y 16 en 2008. Las madres de las mujeres desaparecidas en Ciudad Juárez han buscado a sus hijas y han protestado de diferentes maneras. 

Por ejemplo, el 10 de diciembre colocaron más de 300 zapatos rojos en la explanada de la Fiscalía General del Estado de Chihuahua, para exigir el regreso de sus familiares. 

Posteriormente, en los primeros días de enero, el contingente marchó en medio de un clima gélido para exigir que les sean entregados los restos de jóvenes que supuestamente se encuentran en una oficina forense. Pese a su lucha, lo que más han recibido por parte del Gobierno son promesas.

Dos días antes de que concluyera el sexenio de Felipe Calderón, el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad convocó a reunirse en la explanada de la Estela de Luz, en una protesta titulada Recuento de los daños: Sexenio de muerte, para “recordarle al gobierno que se va que sus muertes y traiciones lo perseguirán a través de los años”.

A través de un comunicado, el colectivo de activistas liderados por el poeta Javier Sicilia, señaló que en nuestro país estaba por concluir “uno de los momentos más oscuros de su historia”: la guerra contra el crimen organizado que lanzó el Calderón en el 2006 y que “ha dejado más 70 mil muertos, 20 mil desaparecidos y más de 250 mil desplazados”. 

A través de su página web, la ONG destacó que dicha base de datos fue elaborada por la Procuraduría General de la República (PGR); además, incluye registros de la dependencia, las 32 procuradurías estatales, el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y la Marina (Semar). Según el documento, del 2 de agosto de 2006 al 29 de febrero de 2012 se reportaron 11 mil 201 hombres desaparecidos y 8 mil 340 mujeres, mientras que en mil 310 casos no se sabe el género”.

Artículo 129. En tiempo de paz, ninguna autoridad militar puede ejercer más funciones que las que tengan exacta conexión con la disciplina militar. Solamente habrá Comandancias Militares fijas y permanentes en los castillos, fortalezas y almacenes que dependan inmediatamente del Gobierno de la Unión; o en los campamentos, cuarteles o depósitos que, fuera de las poblaciones, estableciere para la estación de las tropas.

Y, ¿ESO A QUIÉN PUEDE IMPORTARLE...SI SOLO VOLVEMOS AL AYER ?

Don  Guillermo Prieto, patriota insigne escribió una canción profética, que intitulo  “Los Cangrejos”.

Cangrejos, al combate,
cangrejos, a compás;
un paso pa' delante,
doscientos para atrás.
Casacas y sotanas
dominan dondequiera,
los sabios de montera
felices nos harán.
¡Zuz, ziz, zaz!
¡Viva la libertad!
¿Quieres inquisición?
¡Ja-ja-ja-ja-ja-ja!
Vendrá "Pancho membrillo"
y los azotará.
Maldita federata
qué oprobios nos recuerda,
hoy los pueblos en cuerda
se miran desfilar.
¿A dónde vais, arrieros?
Dejad esos costales:
Aquí hay cien oficiales
que habéis de transportar.
Cangrejos, al combate,
cangrejos, a compás;
un paso pa' delante,
doscientos para atrás.
Orden, ¡gobierno fuerte!
y en holgorio el jesuita,
y el guardia de garita,
y el fuero militar.
Heroicos vencedores
de juegos y portales,
ya aplacan nuestros males
la espada y el cirial.
Cangrejos, al combate,
cangrejos, a compás;
un paso pa' delante,
doscientos para atrás.
En ocio el artesano
se oculta por la leva,
ya ni al mercado lleva
el indio su huacal.
Horrible el contrabando
cual plaga lo denunció,
pero entre tanto el nuncio
repite sin cesar:
Cangrejos, al combate,
cangrejos, a compás;
un paso pa' delante,
doscientos para atrás.

           ¡TAL PARECE QUE EN MÉXICO, ….NO PASAN LOS AÑOS!

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